Nada ni nadie
Nada.
Tanto tiempo sin escribir
y ahora no me salen las palabras,
no la encuentro.
Me miro frente al espejo
sin hallar un rostro reconocible,
sin palabras.
Me siento una porrista norteamericana
en decadencia, pidiendo letras
para formar palabras.
Quiero estar sola decía mientras
se ofrecía a acompañarme
hacia una muchedumbre.
Ya nadie ganaba nada, mientras
compulsivos seguíamos apostando
todo lo que teníamos:
Nada.
Tantos sueños para despertamos
sin encontrar techo donde dormir
con nuestros fríos.
Te veo con una jaula detrás
de la barra donde los pájaros
se escondían.
Quiero esa llave para poder abrirte
a un mundo sin candados,
el mundo que perdí.
Ya no creías en mis fábulas
irónicas desangrándose en los oídos
por absolutamente,
Nada.